Más de la mitad de los usuarios de redes sociales en todo el mundo (55%) reconoce que buscar un empleo es uno de los motivos por los que está presente en ellas. En España, el porcentaje se eleva hasta el 69% de los usuarios, 14 puntos por encima de la media.
El uso de LinkedIn está mucho más extendido en España que en otros países. La media mundial, en torno al 35%, en España sube hasta el 64%.
Además, ocho de cada 10 reclutadores y responsables de Recursos Humanos utiliza las redes sociales en sus labores de búsqueda y selección de personal.
Por todo ello, vamos a darte una serie de consejos para usar LinkedIn a la hora de buscar trabajo. No los pierdas de vista:
- Rellena tu perfil de forma exhaustiva. Incluye en él la mayor cantidad de información relevante. Puede ser tedioso, pero recuerda que buscar trabajo es un trabajo en sí mismo. Son muchos los usuarios que no completan estos apartados y si tu lo haces, te diferenciarás de los demás.
- Haz que tu perfil se “posicione”. Necesitas que cuando un reclutador busque en LinkedIn un profesional como tú, te encuentre. Por eso hay que ponérselo fácil. Piensa cuáles serían esas palabras clave por las que te gustaría que te encontraran (por ejemplo, “periodista” o “sanitario”…) y úsalas de manera natural en tu perfil, en el título… o incluso pide a tus contactos que las usen en las recomendaciones.
- Configura la privacidad del perfil. Si estás dispuesto a que cualquier reclutador te encuentre, lo mejor es que dejes tu perfil de LinkedIn abierto. Así todo usuario podrá acceder a la información que has incluido en él. Aporta todas las formas posibles de encontrarte. Incluir un email, el usuario de Twitter o un número de teléfono en el apartado del perfil destinado a estos datos personales, es altamente beneficioso sobre todo si estás buscando empleo.
- Aprovecha el área “Empleos”, desde la que podrás buscar los puestos de trabajo que las compañías estén ofertando en LinkedIn. Dentro del área “Empleos que podrían interesante” también verás un enlace con el que podrás configurar distintas alertas para recibir una notificación en tu correo electrónico cuando se anuncie un nuevo trabajo que cumpla con los criterios que selecciones. Además, en la columna de la derecha tendrás acceso a todos los empleos que hayas guardado al visualizar una oferta, a tus búsquedas guardadas y a un histórico de candidaturas enviadas a otros procesos de selección, desde el que podrás seguir su evolución.
- Exprime el buscador de Linkedin. El buscador de LinkedIn es muy potente. Se le puede sacar partido utilizando el selector de tipos de búsqueda que se encuentra a la izquierda de la caja y que te permitirá refinar la para encontrar resultados por personas, empresas, puestos de trabajo…Algo que muchos usuarios de la red profesional no conocen es que se pueden guardar las búsquedas lo que permitirá acceder posteriormente a ellas y, volviéndolas a ejecutar, encontrar nuevos resultados. También se puede configurar que llegue una alerta diaria o semanal a tu correo electrónico con los nuevos resultados que se fueran incorporando desde la última búsqueda.
- Apuesta por la calidad de tu red de contactos. Aumenta en la medida de lo posible tu número de contactos, pero hazlo siempre con gente de confianza, que conozcas o con quien hayas tenido una relación profesional. No sirve de nada sumar contactos, es mejor generar una red de calidad, basada en el conocimiento.
- Sigue empresas. Aquellas en las que te gustaría trabajar o que son relevantes para tu sector. Aquellas donde trabajan tus contactos o aquellas que ya están utilizando linkedin para reclutar, aunque no sea relacionado con tu formación, pero serán aquellas que cuando tengan un proceso de selección abierto lo hagan por Linkedin.
- Aprovecha los grupos. Permiten estar al día de novedades de tu sector, debatir con otros expertos, mostrar tus fortalezas, mejorar tu marca personal… Busca aquellos que te interesen y se un usuario activo en ellos para posicionarte entre los profesionales que los integran y conocer a muchos de ellos haciendo networking.
- Consigue recomendaciones. Ya sea de forma natural o porque se lo pidas a determinados contactos con los que tengas confianza y una relación profesional especial, logra cuantas más recomendaciones positivas mejor, pues aportarán credibilidad a tu perfil. No solicites recomendaciones a quien no conoces o a personas que no puedan aportar una valoración certera de tu trabajo.
- Pide que te validen las aptitudes. LinkedIn incluye en tu perfil una serie de aptitudes a modo de palabras clave. Otros usuarios serán encargados de “validar” esas aptitudes que se supone que tienes, y la información se mostrará en el perfil. Solicita a tus contactos que validen las aptitudes por las que consideran que destacas. Una buena forma de hacerlo es validando tú las suyas primero.
- Da a conocer tus objetivos. Si no te importa que tu red de contactos sepa que estás buscando un empleo, no te preocupes por mencionarlo en tu perfil, pero en el apartado extracto, no en el título del mismo. Coméntaselo también a tus contactos y a quienes pudieran llegar a ayudarte en la labor de búsqueda. Incluso puedes publicar una actualización comentándolo, sobre todo, si acabas de quedarte sin trabajo.
- Si no quieres que sepan que estás buscando empleo, oculta tu actividad. Es posible que no desees dar pistas a tu jefe de que deseas cambiar de trabajo. Si se dan cuenta de que has estado mejorando tu fotografía, has incluido nuevos datos en tu perfil sabrán de tu inquietud laboral.Para que nadie de tu red sepa tus movimientos en un momento dado, desactiva la opción “difusión de tu actividad”.
- Aprovecha las funciones ‘premium’ de LinkedIn. Quizá te convenga realizar una pequeña inversión y convertirte en miembro premium de LinkedIn para tener acceso a más herramientas y funcionalidades ahora que estás buscando empleo.
Fuente: Trecebits