La nube lo cambia todo, desde la forma de ofrecer y consumir la tecnología hasta el rol de los que, hasta ahora, se han encargado de liderar estas áreas: los directores de TI o CIO, como se conocen estos perfiles por sus siglas en inglés (de Chief Information Officers), ya popularizadas en todo el mundo. ¿Hasta qué punto se transforma esta actividad? ¿Cómo tiene que ser el nuevo CIO en la empresa del siglo XXI en la que numerosas infraestructuras, aplicaciones y servicios estarán en la nube y serán gestionados por un tercer proveedor? La definición del nuevo puesto ya está acuñada. IDC lo llama “bróker de servicios”, un perfil que irá ganando enteros a lo largo de este 2014 (es una de las grandes tendencias que observa la consultora para este año) y cuyo gran reto será la gestión de entornos de informática corporativa que serán cada día en mayor medida híbridos. Y es que, según la firma de análisis, a medida que las organizaciones vayan aumentando la adopción de cloud, en su seno convivirán diversos entornos de nube (privada y pública, es decir, entornos híbridos) donde cada carga de trabajo se adapte de forma dinámica a la mejor opción existente. ¿La consecuencia? La existencia de un modelo informático más complejo que requiere de un gestor de servicios que lo administre de forma cabal: el nuevo CIO.
De gestor a facilitador
Para el analista independiente Jaime García Cantero, el CIO, entendido como un bróker de servicios, “pasa de ser un gestor de activos a un gestor de servicios o, mejor, dicho, ni siquiera es un gestor como tal de la tecnología, sino que es el que decide el marco en el que otro proveedor brinda estos servicios”. Es, en suma, “un facilitador”.
El rol del CIO como gestor de proyectos se acentúa también. “De hecho, el tipo de proyectos de tecnología que se dan en las empresas también están cambiando con el auge de la nube”, explica García Cantero. “Antes, por ejemplo, era impensable tener varios proyectos abiertos; hoy es posible porque la nube permite la experimentación de nuevas aplicaciones y tecnologías a un coste menor y con mucha más flexibilidad”. El experto añade que hace unos años era impensable implantar un CRM para probar mientras que hoy es algo muy habitual con las soluciones que existen en cloud.
De ahí, por tanto, que cobre fuerza el rol de project manager en los departamentos de TI. Unos gestores, por otro lado, que deben incorporar altas dosis de innovación para poder reinventar los procesos en sus empresas.
En cuanto a los conocimientos técnicos que los CIO y otros perfiles del departamento de TI deben manejar en esta nueva era de cloud, García apunta que “éstos son los de siempre. Cloud ha impuesto nuevas formas de gestionar las tecnologías, pero estas últimas siguen siendo prácticamente las mismas de siempre. El cambio se está produciendo en las habilidades de gestión, no en las técnicas”.
Departamentos enteros orientados a servicios
En definitiva, el auge del modelo en la nube no solo está transformando la manera en la que las empresas y entidades públicas compran e implantan la tecnología e incluso el rol de su máximo responsable, el CIO, sino también la labor de los propios departamentos de TI que ahora se focalizan –deben hacerlo– en la gestión de los servicios para lo que, recuerdan desde la consultora IDC, no solo serán necesarios cambios tecnológicos sino también organizativos y culturales. “Un hito imprescindible en esta reorientación a servicios es la utilización de un catálogo de servicio dinámico que incorpore conceptos de autoprovisión por parte de los usuarios”, sentencia un informe de la consultora.
FUENTE: cloud.ticbeat.com