Un reciente estudio realizado por Freeform Dynamics a más de 1.400 ejecutivos de TI y de negocio en 16 países del mundo, incluido España, revela que existen tres grupos diferenciados de organizaciones compitiendo en la carrera hacia la transformación digital. En primer lugar, los disruptoresdigitales, que son los que están experimentando un gran impacto positivo. Les sigue el grupo de organizaciones que están haciendo progresos significativos en su transformación digital; y cierra la carrera el grueso de las compañías, un grupo que ha comenzado el viaje, pero al que le queda camino que recorrer.
La transformación digital no es un parche
En el fondo, la transformación digital implica uno o varios de los siguientes pasos: revisar y rediseñar la experiencia del cliente, revisar y rediseñar la eficiencia operativa del negocio y, en los casos de transformación más radicales, cambiar lo que se vende, cómo se vende, dónde se vende y a quién se vende.
Es alentador saber que más de la mitad de los encuestados (55%) describe la transformación digital de su organización como un programa estratégico y coordinado y no como un hecho aislado. El 20% declara que la estrategia digital sirve para mejorar su forma de hacer negocios y no para transformarla completamente. Aunque es algo positivo, no están aprovechando todo el potencial. El 17% de los consultados declaran que la actividad digital del negocio se proyecta en cuatro áreas corporativas y el 8% en cinco. Éstas son: Marketing, Operaciones, Atención al cliente, Desarrollo de productos o servicios y Ventas.
Y es que la transformación digital no puede ser una solución puntual ni departamental, debe reflejarse en el ADN de las organizaciones y su negocio. Por ello, la media de departamentos implicados en este tipo de iniciativas es de 2,6 y llega a 6 en el caso de las empresas encuestadas con mayor actividad.
Hacer lo de siempre, pero de forma más efectiva e inteligente
En el Gartner Symposium/ITxpo celebrado este año en Orlando, Chris Curran, Principal and Chief Technologist de PwC, destacó que el 92% de las compañías encuestadas sobre el área de negocio digital no buscan convertirse en Uber ni Amazon, sino alcanzar dos objetivos primordiales: mejorar la relación con los clientes (existentes y potenciales) y ser más eficientes en sus operaciones.
El estudio de Freeform Dynamics refrenda esta observación; el 91% de losdisruptores digitales tienen iniciativas planificadas o en curso relacionadas con las operaciones del negocio y la entrega de productos y servicios, y un 88% de ellos las tienen para mejorar la eficiencia y la eficacia de sus empleados. Dentro del segundo grupo de empresas, las que están haciendo progresos con sus iniciativas digitales, estos porcentajes son el 87% en operaciones y el 86% en eficiencia.
La importancia de la inversión en movilidad y redes sociales
Entre los canales digitales emergentes orientados al cliente, destaca la tecnología móvil. El 64% de los disruptores digitales, que probablemente están muy avanzados en el desarrollo de apps móviles, ven como un aspecto clave el desarrollo de aplicaciones móviles y casi la mitad (48%) el uso de las redes sociales, una cifra algo menor que la de la movilidad, pero con amplias perspectivas de crecimiento. Lo que quizá es más interesante es que el siguiente grupo de empresas en avance digital también destaca la importancia esencial de la movilidad (43%) y las redes sociales (31%) e incluso un 25% de las empresas que forman el tercer grupo, el grueso de las compañías entrevistadas, también ven la movilidad como clave para el éxito.
La importancia otorgada a los wearables es algo inferior, aun así un 35% de los disruptores digitales la considera un área crítica de desarrollo, un porcentaje inferior a otras áreas tecnológicas pero también significativa y con perspectivas de crecimiento a medida que se reconozca su impacto y valor. Por otro lado, un 51% de los disruptores digitales considera el Internet de las Cosas como área también clave.
El sector público el más rezagado del mundo digital
En consonancia con su naturaleza altamente competitiva, los sectores de telecomunicaciones, servicios financieros, comercio minorista y automoción se encuentran a la cabeza del ranking “Digital Effectiveness Index” (una clasificación que mide la adaptación digital de las empresas y cómo esta afecta a su competitividad y rentabilidad, entre otros indicadores).
En este listado, el sector público ocupa la posición más baja. Los gobiernos locales y nacionales no tienen la preocupación de la competencia, sin embargo, la transformación digital es una oportunidad para conseguir una mayor participación ciudadana, para conocer mejor sus necesidades, y también para garantizar un mayor compromiso y comprensión a través de los canales digitales más adecuados.
FUENTE: ticbeat.com