Los estadounidenses no usan Whatsapp para comunicarse entre ellos; allí la red social estrella es Snapchat. Y no es algo exclusivo de millenials o de la generación Z(las nomenclaturas marketinianas para referirse a los menores de 30 años) sino que la edad media de sus usuarios es bastante más amplia. Un dato revelador si tenemos en cuenta que muchas de las tendencias que llegan a Europa lo hacen procedentes del otro lado del charco.
Esto no quiere decir que Snapchat vaya a desbancar a Whatsapp (al menos de momento) pero a estas alturas sería un error creer que las empresas y marcas pueden mantenerse ajenas a su crecimiento. Con 100 millones de usuarios activos cada día, 6 billones de reproducciones diarias y 60 millones de visitantes al mes, por citar sólo algunas cifras, no es como para tomarse a la red social del fantasmita a la ligera.
Nike, MTV, Subway… son muchas las grandes multinacionales que ya han incorporado Snapchat en sus estrategias de marketing y algunas incluso han lanzado campañas basadas en ella Aunque eso sí, con presupuestos millonarios. Entonces ¿qué hay de las pymes y de las marcas más pequeñas? ¿tienen algo que hacer?
Llegados a este punto, si eres propietario o trabajas en alguna de ellas quizás te estés agobiando (“¿Seré el único en este planeta que aún no usa Snapchat?). Ni mucho menos. Lejos de pretender que te lances de cabeza a grabar vídeos que se autodestruyen, lo primero que hay que evaluar es si a tu empresa le interesa estar presente en una red social como Snapchat.
Como ocurre con Facebook, Twitter, Instagram y todas las demás redes sociales, cada una es más apropiada para un tipo de compañías u otro, en función del producto o servicio que ofrecen y del público al que se dirigen. Pero también del tono comunicativo y de la personalidad que tenga nuestra marca: aunque lo habitual es que un despacho de abogados sea serio y formal, puede haber un bufete que quiera diferenciarse del resto y apostar por la frescura y el dinamismo para comunicarse con sus clientes.
Lo bueno que tiene esta revolución de Snapchat es que todavía son pocas las empresas e instituciones que se han unido a ella (La Casa Blanca abrió su cuenta a principios de 2016), de modo que es relativamente fácil posicionarse como pionera y aventajar al resto.
Lo primero, ¿qué es Snapchat?
Aunque habrás oído hablar de ella unas cuantas veces en el último mes, no está de más recordar en qué consiste Snapchat: esta aplicación permite enviar foto-mensajes y video-mensajes (conocidos como ‘snaps’) que se autodestruyen tras un período de 10 segundos. Aunque es posible hacer capturas de pantalla, el servicio notifica al usuario que ha enviado el mensaje, de modo que puede saber si lo que comparte queda en poder de su interlocutor.
Este carácter efímero la hace especialmente incesante para las marcas, ya que genera la necesidad de conocer la información que en ella se publica antes de que deje de estar disponible. Pero no es lo único atractivo de Snapchat: en realidad va más allá de lo que un servicio de mensajería al uso puede ofrecer, ya que sus innumerables posibilidades de edición de fotos, filtros y texto la convierten en un canal de comunicación creativo, humorístico y muy divertido que ofrece muchas posibilidades, sobre todo con el público más joven.
¿Que puede aportar Snapchat en mi estrategia de marketing?
Mientras te planteas si incorporar Snapchat en la estrategia digital de marketing de tu empresa, es importante que conozcas todo lo que esta aplicación puede ofrecerte:
- Fortalecimiento de marca: con tantos millones de usuarios en el mundo, si tu marca está en Snapchat gana en visibilidad. Con ella puedes compartir momentos especiales con tus clientes y ofrecerles una experiencia diferente. Por ejemplo, grabando vídeos corto donde muestre los beneficios de tu producto, o incluso aclarar algunas dudas con respecto a él, es una forma novedosa en la que te podrás comunicar con tus clientes, y así lograr una buena interacción social.
- Emocionar: como te decíamos antes, el hecho de que los mensajes permanezcan publicados solo durante periodos cortos de tiempo hace que los usuarios tengan la necesidad de verlos, lo que resulta tremendamente útil para ‘llamar a la acción’ (call to action). Una forma de sacarle todo el jugo a esta autodestrucción de los mensajes es al publicar ofertas, cupones o descuentos, con los que premiar a los seguidores más comprometidos y crear incentivos para que esa relación perdure.
- Generar contenido exclusivo: su formato efímero convierte a Snapchat en un canal ideal para lanzar demos o anticipos de pruebas de productos o servicios. De esta forma, se genera una mayor expectativa alrededor de novedades que sean de interés para la compañía y es más fácil generar ruido.
- Cubrir eventos: Snapchat cuenta con una característica, ‘Stories’, que permite agrupar y mostrar todos los mensajes del día en un período máximo de 24 horas, lo que la hace muy útil para cubrir eventos. Además, gracias a su función de geo-localización, los usuarios que pasen cerca de tu negocio pueden añadir sus fotos y vídeos a un mural de acontecimientos relacionado con tu marca.
- Redefinir tu marca para un público más joven: si tienes claro que tu target son los jóvenes y adolescentes y hasta ahora no has conseguido que se fijen en tu marca a través de otros canales, ha llegado el momento de que habrás una cuenta en Snapchat. El vídeo puede ser más poderoso que una foto enInstagram o un tuit (sobre todo pare ellos), y si los acompañas de influencers, mucho mejor.
- Mostrar el ‘backstage’: una estupenda forma de generar engagement con el público de tu marca es haciéndole partícipe de ella, mostrándole lo que hay “detrás”. Empléala para enseñarle el día a día de los miembros del equipo de trabajo y permítele echar un vistazo, aunque sea efímero, de aquellas cosas que suceden al interior de la compañía.
Fuente: Ticbeat