La facilidad que ofrece para dar los primeros pasos en su plataforma y su carácter gratuito, son características que hacen de Google Classroom una alternativa a considerar por parte de docentes independientes e instituciones educativas para llevar a cabo sus clases en tiempos de pandemia.
Si te interesa conocer más acerca de esta herramienta, presta atención a los consejos que enumeramos a continuación, para sacarle el máximo provecho.
Sigue los consejos de los primeros pasos
Para entrar en Google Classroom sólo es necesario contar con una cuenta de Google. Todo es más fácil si se cuenta con una cuenta de G Suite para Centros Educativos previamente configurada, mediante la cual se pueden asignar docentes y estudiantes a sus respectivos cursos.
Tras iniciar sesión, aparecerán diálogos emergentes con guías e instrucciones que te presentarán la plataforma y te guiarán por los primeros pasos que des dentro. A menos que seas un usuario experimentado, te recomendamos leer estas guías. La plataforma de Google Classroom es intuitiva, pero conocerla con claridad desde el inicio facilitará su correcto manejo.
No dejes pasar ninguna de sus funciones
Google Classroom es una herramienta versátil y de fácil uso, dado que guarda relación en cuanto a su dinámica de operación con otras plataformas presentes en el mercado actual.
Sin embargo, cuando se dan los primeros pasos, podrían quedar desatendidas algunas funciones que enriquecerían el proceso educativo en caso de aprovecharse adecuadamente.
A nivel de organización de una clase, puede añadirse información descriptiva sobre la misma (para ordenar su gestión dentro de la plataforma), añadir o quitar estudiantes o docentes colaboradores, calendarizar las clases, configurar los permisos para comentar o realizar publicaciones, entre otros ajustes más.
En cuanto a la gestión de las tareas, los estudiantes las pueden administrar desde una plataforma unificada, los docentes pueden publicarlas con documentación adjunta (y reutilizarlas en futuras publicaciones, como plantillas) y el intercambio de archivos puede realizarse a través de Google Drive. Además, la revisión de tareas se somete a un filtro que detecta citas y plagios.
Las calificaciones pueden enviarse a través de un canal personalizado a cada estudiante. Los docentes pueden revisar el rendimiento de cada uno de sus estudiantes, revisando su historial a modo de ficha. También pueden comunicarse masivamente con todos los estudiantes que se encuentren bajo la misma situación (reprobados o sin entrega, por ejemplo). Junto con la calificación final, la tarea puede ser reenviada al estudiante con anotaciones sobre la evaluación.
Las herramientas de comunicación de Google Classroom contemplan el uso de un tablón, que funciona como un foro de curso. Además, los docentes pueden publicar avisos a nivel de curso tanto en la plataforma como a través de correos electrónicos masivos.
Durante las clases, estudiantes y profesores pueden intercambiar comentarios, mencionarse, intercambiar sitios web, compartir contenido desde sus dispositivos y participar de videoconferencias.
Para comunicarse con padres o tutores, los docentes pueden generar informes de manera automática para enviárselos.
Las funciones son muchas. Si te interesa profundizar el uso de alguna en particular, puedes consultar la guía oficial de Google Classroom en español.
Fuente: WWWhatsNew