Las codiciadas gafas inteligentes de Google, las Google Glass, es uno de los dispositivos ponibles o wearables que más expectación está generando en el mercado. Solo unos pocos, hasta la fecha, han podido probarlas, aunque ahora serán muchos más después de la reciente iniciativa de la compañía de vender por un día este producto en Estados Unidos; una especie de experimento de la empresa de Mountain View para saber la acogida real que puede tener el dispositivo cuando lo lance a gran escala.
Ya hemos hablado en muchas ocasiones sobre cómo funcionan y qué tecnología tienen detrás pero no está de más echar un vistazo a una infografía elaborada por Martin Missfeldt en la que se explican estos aspectos. De forma rápida y visual aparecen todos los componentes del producto y cuál es su función. Las Glass se componen básicamente de una cámara de 5 megapíxeles, capaz de grabar vídeo a 720p, un micrófono, un proyector de imagen, un prisma visual donde se proyectan las imágenes, Wifi, Bluetooth, una batería con una duración media de un día, un almacenamiento de 16 GB sincronizado con la nube, un giroscopio y un acelerómetro de 3 ejes, un sensor geomagnético, un sensor de luz y proximidad, una montura ajustable y un sistema de inducción ósea para la transmisión del sonido.
El funcionamiento de las gafas es sencillo y con ellas se puede hacer multitud de tareas utilizando los comandos de voz o con una banda táctilen la patilla derecha que funciona de forma parecida a la “Click Wheel” de los antiguos iPod. Además, las gafas no solo se activan con estos dos sistemas, sino que también son capaces de interpretar los giros de la cabeza, de manera que también se pueden hacer cosas impresionantes, como por ejemplo orientar el GPS cada vez que mueves la cabeza.
FUENTE: ticbeat.com