El aprendizaje a través de las plataformas online, también conocidas con el nombre de MOOC (curso online masivo en abierto), es una tendencia que gana cada vez más terreno en el sector educativo incrementando la competición con los métodos educativos tradicionales. Desde su aparición, ele-learning ha estado rodeado de polémica, en gran parte determinado por la novedad del medio y por inquietudes de si un sistema tecnológico trasladado a la educación es realmente fiable para funcionar como alternativa a las clases presenciales.
Cierto es que los usuarios estamos cada vez más al día con el progreso tecnológico debido a una reorientación en el consumo hacia este tipo de productos y que de alguna manera nos exigen una necesidad de actualización constante. Por lo tanto, las dudas relativas al uso en sí de las plataformas de aprendizaje digitales ya no sigue siendo un problema, en cambio falta demostrar si e-learning tiene el potencial de convertirse en un herramienta capaz de cumplir los mismos objetivos que el método tradicional.
La eficiencia de los MOOC en comparación con las aulas convencionales ha representado el objetivo de un estudio realizado por un grupo de investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts en colaboración con la Universidad de Harvard y la Universidad Tsinghua de China. El equipo ha analizado el proceso de aprendizaje de un grupo de estudiantes mediante la plataforma abierta edX.org proponiéndoles un cuestionario antes y después de cursar la clase de física MITX 8.MReVx Mechanics ReView.
Aprendizaje eficiente incluso para los alumnos con baja preparación
Los resultados publicados en la Revista Internacional de Investigación en la Educación Abierta y a Distancia han revelado unas conclusiones muy distintas a lo que se esperaba el equipo investigador: las clases onlinepueden ser una vía de enseñanza igual de eficaz que los cursos tradicionales, independientemente del nivel de preparación o de conocimientos con el que empiezan los estudiantes.
El experimento usó el mismo sistema de análisis para estudiar la eficacia de al menos 65 clases convencionales del MIT. David Pritchard, uno de los autores del proyecto, afirma que los resultados finales indican una situación igual o mejor para los estudiantes inscritos en la modalidad online: “la cantidad aprendida es algo mayor que en el curso basado en la clase tradicional”. Para llegar a estas conclusiones el equipo analizó en detalle las tareas y pruebas semanales de cada uno de los alumnos usando un método de análisis estadístico para garantizar la coherencia.
Otro descubrimiento encontrado después del análisis comparativo señaló que el nivel de mejora observado “no es diferente para las personas expertas de la clase y los estudiantes mal preparados. Todos ellos mostraron el mismo nivel de crecimiento”, apunta el estudio.
Los resultados finales revelan que la plataforma educativa online se adapta tanto a los alumnos con un nivel de conocimiento mayor así como a los menos preparados de la clase, sumando al aprendizaje eficiente la posibilidad de ofrecer sin diferenciación a sus usuarios las condiciones necesarias para incrementar el nivel de conocimientos.
Los autores de la investigación creen que el experimento realizado es sólo el comienzo de un proceso de minería de datos obtenidos a partir del análisis de las plataformas educativas online donde se pueden observar todos los detalles de las interacciones de los estudiantes, desde cuánto tiempo pasan viendo conferencias, con qué frecuencia se detienen o vuelven a repasar distintas secciones, cuánto leen de los libros de texto y muchas otras actividades parecidas. Toda la información podría servir para continuar la línea de investigaciones orientadas a la búsqueda de los sistemas educativos que mejor funcionan.
FUENTE: ticbeat.com