No hablamos de ella pero está ahí y nos va a tocar a todos. La muerte es algo tan natural como la vida, pero no resulta un tema agradable de mentar para la mayoría. Ello explica que muy pocos usuarios se planteen qué ocurrirá cuando ya no estén, sobre todo en lo relativo a su huella digital.
Desde que está Internet tenemos dos “versiones” de nosotros mismos, la física y la digital, que se complementan y nos retratan. La primera se acaba inevitablemente cuando morimos, pero la segunda sigue “funcionando” y de algún modo nos mantiene vivos en la Red.
Por eso es tan importante que pensemos en lo que queremos que ocurra con los servicios en los que estamos suscritos cuando muramos. Facebook por ejemplo tiene servicios que ofrecen al usuario fallecido dejar una especie de “testaferro” que gestione su cuenta y Twitter ofrece algo similar, permitiendo a una persona autorizada que solicite el cierre de la cuenta de un usuario en su nombre.
Pero si hay un servicio al que están suscritos la inmesa mayoría de usuarios, ese es Google. Esta cuenta incluye accesos a tantas herramientas y plataformas distintas que la actividad que registra en enorme y de lo más diversa, (fotos, correos electrónicos, documentos, ETC) quedando huérfana y activa si abandonamos este mundo.
Pero Google es de los pocos que tiene habilitada una herramienta para que el usuario decida qué le ocurrirán a sus datos cuando ese día llegue. Se trata del Administrador de Cuentas Inactivas y aunque lleva funcionando desde 2013 no todos los usuarios conocen su existencia.
Esta aplicación permite programar periodos de inactividad de la cuenta de Google, y una vez superados, los datos son cedidos a un tercero de confianza que nosotros elijamos o directamente eliminados. Cabe destacar que el motivo de inactividad no tiene por qué ser la muerte, pero para estos casos también es útil.
Cómo funciona el Gestor de Cuentas Inactivas de Google
El primer paso evidente es iniciar sesión en Google y después pinchar en “Mi cuenta”. Una vez dentro, dirígete a “Información personal y privacidad” y pincha en “Controla tu contenido”. Aquí es donde puedes cambiar la configuración de tu Administrador de cuentas inactivas.
A partir de aquí la herramientas te ofrece las siguientes opciones:
- Tiempo de espera, donde marcarás el periodo tras el cual tu cuenta se considerará inactiva (puede ser de 3 a 18 meses). Este tiempo empieza con la última actividad que hayas realizado habiendo iniciado sesión en tu cuenta de Google.
- Alertas, donde hay que marcar cómo quieres que el gestor te avise de que va a finalizar el tiempo de espera que hayas marchado (puede ser por vía SMS o por correo electrónico). La alerta te llegará un mes antes si marcas el periodo mínimo y hasta 3 meses antes si elijas el máximo de 18.
- Notificar a los contactos y compartir los datos, aquí puedes elegir a qué contactos de confianza (máximo 10) quieres que se notifique que ya no utilizas la cuenta e incluso darles permiso para que accedan a tus datos. También tienes la opción de configurar una respuesta automática, que le llegara a todo aquel que te contare por email.
- Eliminación de la cuenta, en cuyo caso dar permiso a Google para que elimine tu cuenta en tu nombre, con todos los servicios asociados a ella (vídeos de YouTube, publicaciones de Google+, blogs de Blogger, etc).
Fuente: Ticbeat